Traza tus planes, alcanzarás tus objetivos

Todos nosotros perseguimos a lo largo de nuestra vida multitud de objetivos. Pueden ir desde algunos que nos proponemos en el día a día, otros que requieren meses y otros de larga duración que pueden conllevar años. Todos tienen un denominador común y es que debemos analizarlos cuidadosamente para tratar de conseguirlos de la manera más eficiente. Como sabiamente dijo Larry Elder ‘Un objetivo sin un plan es sólo un deseo‘ y es la primera frase que me viene a la mente cuando tengo un nuevo proyecto a la vista.

Tener en mente en todo momento el estado en el que nos encontramos para la consecución de una meta nos ayudara a tener una visión completa y nos motivará a seguir luchando para su consecución. Tener presente en todo momento los hitos conseguidos conllevará que sintamos el objetivo final más cerca y aquello que creíamos imposible lo tengamos en un momento dado al alcance de la mano. «Impossible is nothing»

Muchos de vosotros cuando habéis leído los dos primeros párrafos se os ha venido a la mente lo que solemos hacer al comenzar un año nuevo. Por aquello de «Año nuevo, vida nueva» nos planteamos objetivos para el año que comienza pero a los pocos día de su comienzo, muchos de nosotros olvidamos los objetivos y al final de año no hacemos balance. Algunos porque sencillamente los hemos olvidado y otros porque la mayoría de objetivos proyectados no han sido logrados.

Una buena manera de no caer en errores citados es anotar nuestro objetivo y subdividirlo en hitos. Recomiendo hacerlo en el sitio muy visible para que lo veamos permanentemente. Otra práctica que ayuda mucho en la motivación diaria a no perder nuestra situación es ir escribiendo los logros diarios ya que semanalmente haremos balance de nuestra situación y nos sentiremos que estamos un poco más cerca de su consecución.

Termino esta minientrada motivadora con otra conocida frase que dice:

Si no sabes a dónde vas, entonces vas a terminar en otro lugar

la cual reafirma todo lo que hemos hablado. Coged papel y boli y anotad todo lo que os proponéis. Revisad continuamente el estado de esa meta y al conseguirlo sentiréis que sois grandes. El futuro sólo depende de lo que hacemos en el presente, así que manos a la obra.