A la hora de comprar una impresora, es preciso conocer un poco más de ellas para poder hacerse un idea de qué es lo que necesitamos, pues existen tanto impresoras de inyección como impresoras de láser. En este artículo, explicaremos las características y la diferencia entre inyección de tinta y láser. De esta forma te resultará más fácil decidirte a la hora de comprar.
Una impresora de inyección es aquella que funciona pulverizando la tinta sobre el papel, realizado por un cabezal de impresión con pequeñas boquillas que se encargan de esparcir la tinta sobre la superficie del papel. En este sistema, se utilizan dos cartuchos, uno de tinta negra y otro de tinta de color, que une los principales colores básicos: cian, magenta y amarillo. Los cartuchos de estas impresoras suelen llegar hasta las 100 copias antes de que sea necesario un recambio.
La impresora láser tiene un sistema semejante al de una fotocopiadora. Esta impresora funciona con tóners de tinta, no con cartuchos, cuya tinta consiste en un tipo de pigmentos triturados y convertidos en polvo, algo aceitoso. La impresión se realiza mediante un cilindro fotosensible el láser que graba el contenido a copiar mediante una carga electroestática. Al pasar por el depósito del tóner, los pigmentos se adhieren, dejando caer el polvo, que es fijado al papel con un rodillo de calor.
A pesar de su coste aún elevado, los profesionales consideran que las ventajas de las impresoras láser frente a las de inyección mueve la balanza a su favor.
- Velocidad de impresión: alcanzan una gran velocidad al no trabajar por secciones o líneas. Esta puede ser quizás la mayor la diferencia entre inyección de tinta y láser.
- Cobertura real: imprimen al 5% de cobertura de tóner
- Calidad: el uso de tóner consigue aún más resolución.
- Consumo: estas nuevas impresoras tienen las características de ahorro integradas.
- Atascos de papel: en su mayoría integran tecnología antiatasco (aunque también puede deberse a un problema «software»).
- Potencia: memoria RAM y procesadores de un gran rendimiento
- Coste del cartucho: a pesar del elevado precio sus mecanismos duran más tiempo
- Caducidad de la tinta: el consumible de las impresoras no caduca ni se evapora
- Silencio: la impresora láser apenas hace ruido.