La historia de este artículo comenzó cuando tras una larga jornada laboral una amable señorita me repartió un flyer, y me permitió conocer Fintonic. Desde aquí, felicitar al equipo de marketing por el diseño del flyer puesto que lo primero que hice al llegar casa fue dirigirme a su sitio web para conocerles un poco más. Y tras un breve análisis del servicio ví que no iba poder no siquiera probarlo. El motivo es sencillo, me niego a facilitarle mis credenciales de acceso a mi cuenta bancaria. Desencantado me marché y continúe buscando alguna alternativa que me ofreciese lo mismo el mismo servicio pero sin tener que proveerse de mis datos de acceso y lo encontré.
Las estadísticas que muestran en la web son sencillas y muy visuales. Mediante un diagrama de sectores podemos ver el porcentaje de nuestro dinero hemos gastado en cada categoría. Contiene un menú análisis con un diseño muy simple pero a la vez efectivo para analizar a lo largo del tiempo el más mínimo detalle. También incorpora una herramienta de presupuesto para aquellos que rápidamente se olvidan de cuánto han gastado en un concepto y quieren limitarse. De esta manera, en el panel inicial de Wallo de un panel que recoge los presupuestos que tenemos habilitados y los importes que aún nos quedan por gastar para cumplirlos.
Hoy en día, prácticamente todo servicio web de cierto éxito tiene una aplicación para Android y iOS y Wallo no es una excepción. Mi experiencia con la aplicación de Android no es satisfactoria. Lleva varios meses sin actualizarse y no tiene soporte para los últimas versiones de Android que ejecuto en la Nexus 7. En versiones anteriores si tiene soporte pero únicamente se limita a registrar transacciones y no permite la posibilidad de visualizar las estadísticas de las que disponemos en la web. Por tanto, aquí tienen un amplio margen de mejora y espero que pronto lancen nuevas versiones.
Estamos preparando una entrevista a los amigos de Wallo. ¿Qué queréis preguntarle? Ahora es el momento.
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