Echas mano al bolsillo en busca de tu smartphone para ver si tienes algún mensaje nuevo y te das cuenta de que no lo llevas encima. Un sentimiento de angustia y preocupación nos invade, un sudor frío recorre tu frente. Tratas de buscarlo por tu alrededor y no aparece. Empiezas a llamarte y nadie contesta…Al menos, está encendido. Este podría ser el escenario de una situación que a nadie le gustaría vivir.
Reconócelo, los terminales móviles son uno de los elementos imprescindibles de nuestra vida. Su pérdida ya no supone sólo su valor económico, hay un valor extra: nuestros datos personales. En ellos se almacena información de contactos, datos bancarios, contraseñas, conversaciones, correos, fotos, documentos, etc. Que pueden ser utilizados por la persona que tenga en sus manos nuestro terminal haciendo que el daño sea mucho mayor.
CUANDO TE PASE
- Búscalo, no hay tiempo que perder. Primero trata de localizarlo buscando en los sitios recientes donde hayas estado y pienses que puede estar.
- Llámate. No perdamos la fe en el ser humano, puede que alguien con buen corazón lo haya encontrado y pueda devolvértelo.
- Geolocalízalo. Ante todo, que no cunda el pánico. Si ves que los pasos anteriores no han funcionado, no llames a tu compañía de forma inmediata para que te anulen la tarjeta SIM, perderás el control remoto sobre tu móvil. Trata de localizarlo con las aplicaciones que tenías instaladas previamente que te proporcionan los propios fabricantes o que puedes encontrar en las tiendas de apps, muchas de ellas gratuitas (Cerberus anti-robo, Free Anti Theft Droid, GadgetTrak, etc). Muchos antivirus a parte del servicio de protección contra virus, te proporcionan aplicaciones antirrobo ( AVG Antivirus, avast! Mobile Security, etc.). Con este tipo de aplicaciones puedes localizar tu móvil en el caso de que se haya perdido o confirmar que ha sido robado. Además, ofrecen servicios muy interesantes como la posibilidad de sacar fotografías a distancia de la persona que se encuentra frente al objetivo y enviarlas por e-mail (muy útil para presentar la denuncia en la comisaría) o borrar los datos almacenados en el terminal de forma remota, evitando que accedan a nuestros datos personales o que hagan un uso fraudulento de los mismos.
- En caso de robo informa a tu compañía. Hay que evitar que hagan llamadas a nuestra costa. Se procederá a suspender la línea telefónica y bloquearán el terminal. Es necesario proporcionar el IMEI (si lo compraste a través de la operadora, ésta debería de saberlo). En caso de encontrar el teléfono, se puede desbloquear de nuevo. Piensa en el IMEI como en la huella dactilar de tu móvil, es un número que identifica unívocamente a cada terminal. Puedes encontrarlo marcando *#06# desde el propio teléfono, en la caja original, en la batería suele venir una pegatina con el mismo o también en las facturas de tu operador o en la factura de compra.
- Es muy importante presentar una denuncia de hurto o robo en la comisaría más cercana indicando el número de teléfono, IMEI y el modelo. Si has conseguido tomar alguna fotografía del presunto ladrón por medio de alguna aplicación antirrobo, no dudes en adjuntarla. Hazlo antes de las 48 horas siguientes a lo sucedido, ya que si tienes un seguro de móvil puede que no se hagan cargo si se denuncia con posterioridad.
- Cambia las contraseñas de los servicios a los que accedías desde el terminal. Evitarás ser víctima de robo de identidad o de que puedan tener acceso a material sensible.
- Recuerda que las compañías no tienen ninguna obligación de facilitar un móvil gratuito al usuario víctima de un robo o hurto. Y si se tenía un contrato de permanencia por la subvención del móvil robado o perdido, hay que cumplirlo hasta el final.
ANTES DE QUE PASE
- Utiliza todos los sistemas de seguridad posibles de tu teléfono: bloqueo de SIM por PIN, bloqueo del teléfono por patrón o por contraseña, cifrado de datos, etc.
- Apunta los códigos PIN, PUK, número de SIM e IMEI en un lugar seguro.
- Ten instaladas y bien configuradas las aplicaciones para localizar, bloquear y borrar datos de forma remota de tu terminal en caso de que haya sido robado. En próximos artículos se mostrarán algunas de estas herramientas más utilizadas por los usuarios y cómo usarlas.
- Evita todo lo posible tener datos sensibles almacenados en tu móvil: contraseñas, cuentas bancarias, documentos confidenciales, fotos y vídeos comprometidos, etc.
- Realiza siempre backups de los datos importantes (contactos, fotos, vídeos, mensajes, etc.) y guárdalos en un lugar seguro. Puedes utilizar programas de sincronización con el PC (como iTunes, iSyncr Lite, Samsung Kies, etc.) o bien mediante servicios de almacenamiento en “la nube” (como DropBox, iCloud, Google Drive, etc.).
¿Has sido víctima del robo de tu terminal? ¿Conseguiste recuperarlo? ¿Cómo fue el trato de tu compañía? Cuéntanos tu experiencia, todos podemos aprender de todos.